Hydrotherapy

Una de las preguntas más frecuentes que nos hacen a los
gastroenterólogos es sobre la utilidad de los llamados lavados
colónicos y terapias de enemas, los cuales vamos a llamar
colectivamente en este artículo como hidroterapia.

El concepto de limpiar el colon no es nuevo ya que desde la medicina
antigua se tiene la teoría que la "autointoxiación" con heces fecales era
perjudicial para la salud. Recientemente, con el crecimiento en el
descontento con la medicina tradicional, se ha visto un resurgir de esta
modalidad de tratamiento, que cabe señalar, es una industria de
millones de dólares. A pesar de los supuestos beneficios que se
promocionan, la utilidad de la limpieza del colon se mantiene
cuestionable y es basada más en el resultado de anécdotas que en
estudios formales.

Los investigadores de un artículo reciente se dieron a la tarea de
evaluar toda evidencia científica publicada entre el 1966 y comienzos
del 2009 y la clasificaron según la calidad de la metodología que se
usó para su análisis. Sólo encontraron 17 artículos publicados que
satisfacían las cualidades mínimas que debe tener un estudio
científico, 6 de los cuales eran de baja calidad y los otros 11 de
mediana calidad. Ningún estudio probó que la hidroterapia mejorara la
salud general o la sensación de bienestar del paciente como se trata
de mercadear esta modalidad de tratamiento. Peor aún, lo que sí
encontraron fue varios reportes de efectos adversos asociados a esta
práctica. Entre ellos figuran perforación intestinal, intoxicación por agua
(debido a una disminución drástica de sodio en la sangre), infección
generalizada y colitis (incluyendo un brote de disentería por un parásito
llamado amoeba).

Si bien es cierto que la medicina natural (no me gusta usar los
conceptos de "alternativa" o "complementaria" porque sugieren la
arrogancia de creer que la que nosotros practicamos es la única
correcta) ha existido por cientos de años antes que la tradicional,
también es cierto que con la madurez de la ciencia, nos hemos
acostumbrado a usar tratamientos que tengan un valor verificable a
través del método científico. Siguiendo esta pauta, nos aseguramos
que cuando le ofrecemos una medicina o un procedimiento a un
paciente, los beneficios siempre deben superar los riesgos, los cuales
son importantes conocerlos y mantenerlos en mente. En el caso de la
hidroterapia, no hay evidencia de que limpiar el colon tenga ningún
beneficio a largo plazo. Este órgano está diseñado para llevar los
desperdicios alimenticios fuera del cuerpo y es nuestro último guardián
contra el desperdicio de agua y sales. Además está lleno de bacterias
"buenas" que le ayudan en su funciones. Limpiar el colon provoca un
desbalance de los procesos usuales, que alteran el equilibrio
fisiológico y químico de este órgano y si lo miramos desde el punto de
vista de sentido común, al par de días va a estar nuevamente lleno de
excremento porque ESA ES SU FUNCIÓN. Lo que sí es importante es
mantener una buena alimentación alta en fibra (aproximadamente 30
gm al día) y con suficiente agua (aproximadamente 2 litros al día) y
prevenir el estreñimiento.